jueves, 8 de octubre de 2009

El sueño de hierro - Norman Spinrad

Muchas veces me he preguntado si es realmente útil recomendar un libro. Cualquier intento de convencer a alguien de que haga algo que a nosotros nos ha gustado suele conllevar el riesgo de que, a posteriori, te pidan encarecidamente que, por favor, la próxima vez cerremos la boca. Este libro me plantea la seria duda de recomendarlo o no.

SPOILER

(Todo lo que viene a continuacion desgrana el contenido del libro, así que si quieres leerlo es bajo tu responsabilidad)

El libro, como tal, nos llega dividido en dos partes:
1.- El 95% del mismo es una novela dentro del propio libro: El señor de la svástica. Escrita por un ucrónico Adolf Hitler, que ha abandonado Alemania para irse a vivir a los EEUU, donde vive como mediocre escritor de Ciencia Ficción.
2.- El resto del libro es una falsa crítica a dicha obra, en la que además se nos cuenta brevemente la vida de Hitler.

Tomando como base el falso libro (y sustrayéndonos por completo de la parte crítica), nos encontramos con una narración panfletaria, una apología del racismo, escrita en clave de CF, donde Feric Jaggar (a Hitler encubierto) alcanza el poder de un territorio llamado Heldon al más puro estilo hitleriano: usurpación del poder. Acontecemos al surgimiento de un minúsculo partido político que, con la llegada de Jaggar y una ideología de caracter racista, alcanza las más altas cumbres de poder en Heldon y va expandiendo su influencia hacia territorios anexos, alcanzando el summum en una guerra fraticida con los habitantes de Zind (supuesta URSS), unos degenerados mutantes, producto de una antigua guerra nuclear en contraposición a la pureza de la raza de los habitantes de Heldon.
El autor no sólo utiliza la ideología nacionalsocialista, si no que incluso se apodera de sus siglas, su parafernalia y sus símbolos, consiguiendo alcanzar una exposición propagandística al más puro estilo totalitario:
-Exaltación de la raza
-Exageración de las características del lider, alcanzando cotas de héroe
-Ridiculización absoluta del enemigo
-...

El autor alcanza cotas insospechadas de exaltación en la continua descripción de las batallas, en las que el protagonista, con un simple golpe de garrote, descuartiza a 20 enemigos a la vez sin sufrir, en todo el libro, ni el más mínimo daño. No importa que el enemigo supere a las tropas de Heldon en multiplos de 10, ni que sean más altos, ni más fuertes: son protoplasmas sin cerebro y, sin el control de los dom, son seres que se mean y se cagan encima. Sin comentarios.

Todo esto, que no quedaría más que en un simple realto de serie B cincuentera, se ve reforzado, de forma magistral, con esa falsa crítica de las últimas páginas.

Quiero creer que el autor, en un arranque de genio, se burla de todas aquellas cosas que rodeaban (y aún rodean) a la CF más pulp y que algunos detractores tomaron por bandera:
-El caracter fálico de las armas.
-La misoginia y machismo que rodea a la CF, en la que las mujeres son meros objetos de decoración.
-Las reminiscencias homosexuales.
-Las incongruencias técnicas.

En cualquier caso, el propio autor nos desvela una parte oculta (o no) de la obra: la alienación. Por mucho que nos sintamos seres libres de prejuicios, inmunes al racismo o la xenofobia, a costa de machacar con la suciedad, la mutación, las desvirtuación del ser humano por las mutaciones, el autor consigue (en algunas partes de la novela) de parte de los seguidores de Jaggar. Y uno, pensándolo bien, se sorprende de lo fácilmente moldeables e influenciables que somos.

FIN SPOILER

Salvo que seas una persona con unos principios muy claros y tengas muy claros tus ideales, mejor no leas este libro.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Hasta los cojo...

Existen momentos en la vida en los que una persona se obligada a decir "¡Basta, ya!". Es necesario si no queremos vernos abocados a una espiral de dudas, condicionamientos y dicotomías de difícil, cuando no imposible, elección. Hoy me he visto en esa situación.

No aguanto más, me niego a escuchar más ninguno de los programas de deportes existentes en las diferentes emisoras de radio. No voy a ser yo quien defienda al actual técnico del Valencia CF, principalmente porque soy uno de tantos defraudados con su actitud y su forma de dirigir el equipo, pero la rueda de prensa de hoy, y algunos comentarios posteriores, ha sido demencial.

Preguntas del tipo: "¿Usted admitiría en su equipo a un jugador que se burlase del contrario?" me parecen fuera de toda lógica y del buen hacer periodístico. Si Cristiano Ronaldo es un gilipollas, y un día le parten la pierna en un terreno de juego por burlarse de X jugador, es su problema y del Real Madrid (aunque ya sabemos lo que conllevaría el asunto). O del tipo: "¿Qué reacción espera del público de Mestalla en el próximo partido?". ¿Qué pretendemos?¿Un titular?¿O simplemente la respuesta manida? Los periodistas de esta ciudad podrían empezar a plantearse seriamente el cambio de profesión, porque entre amiguismos y gilipolleces ya estamos saturados.

El caso es que, sin ser algo baladí, es algo a lo que ya estamos acostumbrados y mi indignación no ha venido únicamente por dicha rueda de prensa. Mi cabreo ha llegado a su máxima expresión como consecuencia de, no sé si consciente o inconscientemente, escuchar al Sr. Víctor Lluch en Onda Cero. Y, realmente, no sabría decir si es con él el mosqueo, con el entrenador, con Llorente o conmigo mismo por ser seguidor de este equipo que más bien parece un puticlub.

El caso es que el susodicho ha comenzado a explicar los posibles cambios del entrenador en la configuración del sistema a emplear a partir del próximo partido, evidentemente no ha informado si es algo que le han chivado, lo ha supuesto él a partir de ver alguna cosa en el entrenamiento, le ha venido la inspiración después de jugar a la demos del FIFA 10 o simplemente se lo ha dictado el alcalde de la Pobla Llarga:
  1. -Compensar las subidas de los laterales, de tal modo que cuando uno de ellos suba la banda el otro mantenga su posición. Hasta ahí nada que no pidiéramos los aficionados de a pie.
  2. -Retrasar la posición de los dos mediocentros. Aquí uno empieza a mosquearse. Viendo cualquiera de los partidos disputados hasta ahora en esta temporada, hemos podido contemplar como, en muchas ocasiones, al menos uno de los mediocentros está prácticamente incrustado entre los centrales a la hora de defender, cómo muchas otras veces alguno de los dos ha bajado a recibir el balón a la altura de los defensas, lanzado balonazos directamente hacia el área contraria,... ¿No sería más lógico retrasar ligeramente la posición de los dos laterales que, cuando salimos con el balón controlado, parten desde la línea divisoria del campo?¿O, incluso, retrasar ligeramente la posición de Silva de forma que pueda conectar más fácilmente con los mediocentros?
  3. -Y el colmo, el sumum de las cosas raras y extrañas. El Sr. Lluch ha venido a decir: "En los partidos que llevamos disputados, el entrenador no ha encontrado una pareja de centrales de garantías (dos partidos Alexis-Dealbert, unos Alexis-Navarro, otro Alexis-Maduro) y se plantea reubicar a Marchena de central. Pero esto no podría hacerse esta jornada puesto que (póngase aquí la palabra deseada, yo me limito a dejarlo en el Llagrimetes) se encuentra enfermo con gripe y con Maduro no cuenta como mediocentro.

En muchas ocasiones me pregunto si los periodistas se consideran seres superiores, piensan que los oyente somos gilipollas y tenemos mala memoria, se inventan las cosas y a ver que pasa o directamente dicen la primera chorrada que se les ocurre.

Sólo por aclarar cosas respecto a ese último punto:
-La pareja Alexis-Dealbert ha jugado dos partidos de forma conjunta, en el primer partido dejando nuestra portería a cero mientras que en el segundo recibimos dos goles habiendo marcado 4. El primer gol llega tras un disparo seco de Canobbio que Moyá rechaza mal y rematado por Nauzet a puerta vacía. Se llega al descanso con 1-3 y, tras el cambio Marchena por Llagrimetes, el equipo pega un bajón de juego brutal. Aún así se llega con el resultado final de 2-4. Si esto plantea dudas yo no entiendo nada de nada. Dealbert no ha jugado los otros dos encuentros por enfermedad, por si alguno no lo sabe.
-La pareja Alexis-Navarro sólo ha encajado un gol (por no saber o no querer hacer una falta táctica) en el partido contra el Sporting. En dicho gol, buena parte de la culpa podría achacarse al portero, Moyá. En el minuto 65 Mathieu se retira lesionado. Esto hace que nuestro entrenador, en un ataque de locura sin precedentes, cambie a tres jugadores de posición y haga que el juego del equipo se resienta. Posteriormente culmina su descontrol con un tercer cambio en el que todo Mestalla se olía lo que iba a pasar: el segundo gol del Sporting. La pareja de centrales en ese momento era Marchena-Navarro (que es la que el Sr. Lluch plantea hoy como la mejor, argumentando que fue la más utilizada hace unos años... No sé cuando ha dicho porque mi ataque de ansiedad ya era brutal).
-La pareja Alexis-Maduro ha encajado 3 goles, los de Getafe, y ciertamente ha sido la más floja. Pero podíamos plantear que, habiendo sido todo el equipo un despitote, igual no son ellos los únicos culpables.

Y yo me pregunto ¿Todo esto por qué? La respuesta la dio el propio Sr. Lluch y ya la puse antes, así que mejor no me repito.

PD: Que ni un sólo periodista haya puesto en la picota (después de los tres primeros partidos) al Innombrable es para plantearse el ir a un psicólogo...

martes, 15 de septiembre de 2009

Karpov vs. Kasparov

25 años despues, y tras la previa de ayer, los dos maximos exponentes ajedrecísticos de la confrontacion ideológica en la URSS vuelven a enfrentarse: el alumno adoctrinado del viejo ideario, Anatoli Karpov, frente al prodigio aperturista, Gary Kasparov.

Aquel campeonato mundial de 1984 (el primero de cinco enfrentamientos) enfrentó no sólo a dos genios si no a la doble vía política soviética: el viejo régimen y el aperturismo hacia un nuevo orden, la Perestroika. Ese campeonato acabó siendo suspendido por problemas de salud de los jugadores (principalmente Karpov) tras 48 martonianas partidas, algo inaudito hasta ese momento en la historia del ajedrez. Dicho aconteciemiento provocó la primera confrontacion de Kasparov con la Federación Internacional, algo que años después se convirtió en ruptura.

Desde el dia 21, y hasta el 24, podremos disfrutar de estos dos Grandes Maestros del Ajedrez en la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia, cuna del ajedrez moderno (supuéstamente, en Valencia se comenzaró a utilizar una reglamentación con el movimiento actual de la Dama).

http://www.matchkarpovkasparov.com/

PD: No es mal horario, pero el coste de las entradas es pa matarlos.

lunes, 7 de septiembre de 2009

"HÉROES DEL SILENCIO- UN FENÓMENO CONTADO EN PRIMERA PERSONA" - RAÚL SENSATO

Hace unos días, aburrido y sin nada concreto en la mente, me puse a navegar por Internet. No sé muy bien cómo llegué a una página en la que un zaragozano (supongo) publicita un libro/tesis de 99 páginas sobre el fenómeno Héroes del Silencio. Cual abuelo Cebolleta rememorando sus historias de la puta mili, este fan que les escribe fue investigando el tipo de libro que era y de lo que trataba.

Debo entender que el que exista una referencia y un enlace, al libro en cuestión, desde la página web de Enrique Bunbury es porque algo de credibilidad tiene el asunto, así que me decidí a comprarlo (respecto a esto, un inciso, el libro cuesta un mísero euro, lo que permite la descarga desde internet del PDF: 99 páginas).

A diferencia de todos los libros escritos en referencia a los Héroes, es de recibo decir que éste no es un libro referido al grupo de forma directa si no indirecta. No narra su historia (bueno algo sí) si no la del fenómeno que se monta alrededor de ellos, de su triunfo y de su caída en su propia tierra, Zaragoza, principalmente: sus inicios, sus primeros seguidores, la tribu que se crea en torno a ellos, su ascenso, la decadencia y la mentira de los popes musicales de aquel entonces.

Puedo decir que el libro se lee en dos ratos, es más, si me apuras, en un rato y medio. Es bastante ameno, cuenta buenas anecdotas y, aunque repite aspectos ya contados en otros libros, llega a sorprender con algunas de las cosas narradas. De hecho, para aquellos que se consideren fans incondicionales, sabe a poco... a muy poco.

En cualquier caso, recomendable para todo aquel que quiera comprender la dificultad que supone a un grupo de provincias llegar a ser la referencia musical de un país que no les olvida y que está harto de según que cosas, musicalmente hablando. ¡Que se jodan!

Para finalizar, el link al libro: http://www.minchinela.com/libros/heroes_del_silencio/

PD: Si alguno lo compra (con tarjeta de crédito, no hay más opción), cuando os salga el enlace definitivo debeis darle con el botón derecho del ratón y elegir la opción de Guardar ;)

viernes, 4 de septiembre de 2009

Nunca me abandones - Kazuo Ishiguro



Hará aproximadamente un año y medio cayó en mis manos este libro. Con la excusa de leerlo junto a otros foreros de Ábrete libro, fui adentrándome en esta historia que, básicamente, podríamos tildar de Ciencia Ficción. Y digo básicamente porque ni siquiera su autor la reconoce como tal. Si tuviera que definirla de algún modo sólo se me ocurren dos palabras: imprescindible y pesar. No es un libro fácil de sobrellevar, más bien lo contrario, así que si eres de esas personas a las que no les gustan las historias sin final feliz... mejor no sigas leyendo.

Bueno, el caso es que la semana pasada, no sé muy bien por qué, se la recomendé a mi mujer, aunque al cabo de cinco minutos me arrepentí. Ella es más bien de novela histórica y la CF como que no, y lo de leer libros con final trágico muucho menos. Pero no lo hice, y ahora me alegro. Le gustó, a pesar de su temática y a pesar de su final, para nada agradable si no más bien desasosegante.

El libro, escrito por un japonés residente en Gran Bretaña desde su más tierna infancia, no narra aventuras siderales, ni conquistas planetarias, ni siquiera visitas extraterrestres... es, más o menos, lo que conoceríamos como una distopía: una utopía perversa, en la que el mundo deja de ser perfecto para convertirse en el más desagradable de los entornos, en el más apocalíptico de nuestros futuros próximos (ejemplos hay muchos en la literatura: 1984, La naranja mecánica, Un mundo feliz,...). Todo esto, repito, en contra de lo que el autor niega. Él define la historia como realidad alternativa, pero ¿qué es una distopía si no eso mismo?

Escrita (y leída) con parsimonia, a paso lento, nos narra los recuerdos de una antigua interna de Hailsham, un típico colegio inglés, con campiñas, praderas, bosques. Pero no es un colegio elitista, si no algo mucho más siniestro. Sin las estrictas normas típicas de la educación inglesa, los alumnos son inducidos a desarrollar su creatividad, porque ellos son especiales. Y es esa cualidad especial la que va haciendo que el libro, conforme pasamos sus páginas, se vaya convirtiendo en un tormento para el lector, un nubarrón que va encogiendo el corazón hasta hacernos ver que no hay esperanza para ellos.

SPOILERS:

Todos estos niños/adolescentes, con libertad sexual (puesto que son estériles en su totalidad) son meros clones. Réplicas que la sociedad utiliza para curar sus males, extrayendo sus órganos sin miramiento (algunos hasta cuatro veces) cual mercancía utilizada para meros fines terapéuticos. A pesar de los intentos de la Madame, los diferentes estamentos sociales rechazan la mera idea de que dichos jóvenes tengan sentimientos. Son meras reses ganaderas a las que mantener hasta que sea necesaria su utilización en trasplantes para sus posibles, las personas de las que teóricamente han sido clonadas.

La búsqueda final del grial, de la salvación para el amor, se ve truncada de raíz: no es posible, ni siquiera factible. Su destino está escrito y no hay modificación posible. Incluso los afortunados alumnos de Hailsham ven como su colegio (en el que el tratamiento es exquisito hacia los adolescentes en contraposición a otros centros) cierra sus puertas, con lo que un mayor catastrofismo invade todo lo que les rodea, la mínima ilusión que eso suponía se va desvaneciendo poco a poco...
FIN SPOILERS


Sé que todo lo escrito es deprimente, oscuro, triste. Pero es lo que el autor nos muestra en su historia, lenta, sin apenas modificaciones destacables, sin variaciones estridentes... pero impasible en su caminar. A ello se unen todos los caminos abiertos y que no se cierran, todas las preguntas sin respuesta, todos nuestros deseos por saber más y que no se ven cumplidos.

¿Será nuestro futuro?

lunes, 17 de agosto de 2009

Definamos miedo

El miedo es una perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario.

El terror es un miedo muy intenso.

Real Academia Española de la Lengua

viernes, 14 de agosto de 2009

... y el genio creó a Alien



Hace unos 30 años (día arriba o día abajo), se estrenó una película de esas que hacen historia. Su protagonista principal era una mujer que encontraba en un ser extraterrestre a su némesis.

Mi idea no es hablar de la película (por si alguien no lo ha adivinado aún, se trata de Alien, el 8º pasajero), si no del hombre que ideó al monstruo: Hans Ruedi Giger, H. R. Giger para los amigos.


Nacido hace casi 70 años, este artista suizo basa su trabajo pictórico en el aerógrafo, mezclando en sus obras el cuerpo humano con parafernalia mecánica concluyendo en lo que el mismo autor da en llamar Biomechanical (traducido al castellano como Biomecanoides, palabra horrorosa como pocas).

Fuertemente marcado por la muerte de su compañera Li Tobler, Giger desarrolla su arte a partir del horror, el sexo, la vida y la muerte, englobado todo ello en un entorno futurista y de marcado carácter surrealista. Es su obra de difícil visionado para el observador por su composición onírica, algo que viene influenciado por literatos y artistas como Lovecraft, Cocteau o Dalí.

Sus obras se han visto recogidas en innumerables libros, el primero de ellos que le hizo alcanzar un considerable éxito fue Giger's Necronomicon (consta de dos volúmenes), que originó su colaboración con Ridley Scott para la película Alien.

Artista polifuncional (dibujante, escultor, diseñador, escritor,... ) ha visto como su obra ha influido notablemente en la creación de films y videos futuristas y de Ciencia Ficción. Sus colaboraciones, además de Alien y algunas de sus secuelas, le llevaron a trabajar con Alejandro Jodorowsky en un intento de crear Dune (proyecto no completado y que realizó finalmente David Lynch sin tener en cuenta a Giger), en Teito Monogatari o en Species.

También ha realizado colaboraciones en el mundo de la música, como por ejemplo las portadas del disco Brain Salad Surgery de Emerson, Lake and Palmer, o Koo Koo de Debbie Harry (vocalista de Blondie).

Hace un par de años se relizó una exposición en la Universidad Politécnica de Valencia. Tuve la oportunidad de ver su obra en vivo y es, simplemente, impresionante.


jueves, 13 de agosto de 2009

Lo que hoy llamamos friki

Eso debía ser yo hará unos 20 años. Evidentemente, por aquel entonces no podías ser un friki del manga o el hentai, ni de Matrix..., como mucho eras un friki del bando Star Wars o del bando treki... en mi caso ni lo uno ni lo otro. De hecho no podías ser un friki, a lo sumo aspirabas a ser raro, tarado o algo similar. Yo era más bien del tipo rata de biblioteca con gustos estrafalarios.

Siempre he sido un lector compulsivo, de hecho mi familia siempre se ha encargado de recordarme que desde niño leía los anuncios en las vallas publicitarias, los folletos, las cajas de detergente,... leía cualquier cosa que caía en mis manos. Queda claro que, con 18 años, a esa edad uno no dispone de ingresos de ningún tipo salvo que te hayas dejado los estudios y te hayas colocado de camata o paleta. No era el caso, así que mi obsesión se veía limitada a los libros que circulaban por casa (no muchos) o que te prestaba algún amigo (aún menos). No es que no tuviera amigos, es que simplemente no leían o como mucho eran comiqueros de alta alcurnia (al menos eso me sirvió para descubrir los Watchmen). La única solución era la biblioteca... y qué solución!!!

No es que me pasara allí encerrado todo el día, la verdad es que no, yo iba a esa zona en la que puedes hacer exclusivamente tuyo un libro durante 15 días: la sección de préstamo.

Cierto es que ya conocía a algunos autores clásicos: Julio Verne, Charles Dickens, Gustavo Adolfo Becquer,... con ellos vivía aventuras maravillosas en el fondo del mar, en el viejo Londres, entre versos y leyendas... Pero es ese reducto de literatura que es la biblioteca descubrí a muchos más, los cuales me abrieron las puertas de otros mundos de aspecto más siniestro y tenebroso, plagados de fantasmas y primigenios, poblados de muerte y fanatismo...

H. P. Lovecraft, Edgard Allan Poe, Lord Dunsany, Robert E. Howard,... Descubrí gracias a ellos esa otra realidad cósmica en la que el terror y el mal se apoderan de todo y no resta más que esperar el fin, sin ningún atisbo de esperanza.

Acudid a las bibliotecas, amad las bibliotecas...

PD: En estos momentos en que no tengo tanto tiempo para acudir a las bibliotecas, y que tampoco la necesidad pecuniaria es tan exagerada, veo con tristeza que se están vaciando... y eso no creo que sea bueno.
PD2: Tengo un cacharrillo nuevo llamado Sony PRS 505 que es gloria bendita. Algún día hablaré de él.

jueves, 12 de marzo de 2009

Cuando la estupidez alcanza límites insospechados...

Yo, como mucha gente de mi edad (38 tacos ya), he crecido con un joystick en la mano. Primero fue aquel viejo Pong de la barrita blanca con la pelota cuadrada, posteriormente el Spectrum o el Amstrad, las maquinitas de los recreativos, luego el ordenador de sobremesa y, posteriormente las consolas de última generación... He jugado a todo tipo de juegos: guerra, beat'em up, deportes, estrategia,... Y, por supuesto, he compartido la experiencia con familiares, amigos y, últimamente, con gente de todo el mundo por Internet... y espero seguir haciéndolo con el que ahora es mi bebé.

No me considero ni más listo ni más tonto que nadie, no he matado, apalizado, violado o atropellado a nadie, y tampoco me he convertido en un ser extraño encerrado en una habitación de la que no sale ni para comer.

Todos estos son tópicos que se han dicho de los videojuegos (algunos también del cine o la televisión). Tópicos que, por la continua repetición a la que nos someten los medios (borreguiles) de comunicación, parecen ser la verdad absoluta.

La nueva invención, porque llamarlo imbecilidad me parece muy fuerte (por los disminuidos psíquicos no por la señora que ha soltado la burrada), viene de la mano de Paloma Pedrero y su columna en el diario La Razón (gracias Internet):

A ver si me aclaro, ¿no llevan las películas una recomendación de edad? ¿Por qué, entonces, los videojuegos violentos no la llevan? Peor aún, la mayoría de estos jueguecitos de play u ordenador son para niños. Es decir, que se supone su idoneidad. Y la mayoría también son de matar o eliminar a enemigos. Los niños no disparan gatillos, disparan teclas, pero la mecánica del cerebro es la misma. Ese tipo de videojuegos destructivos tiene una filosofía pedestre y brutal, tú eres el héroe y los demás son tus enemigos con los que hay que acabar. Dale, dispara, cuantos más te cargues, más puntos tendrás, serás mejor. Esto viene aderezado, además, con unas músicas estridentes y animadoras, ruidos, «flashes» estimulantes. La cabeza de los pequeños pierde la noción del espacio, todo se centra en la pantalla con sus objetivos a abatir. El crío es el rey de un mundo mínimo que le hace sentir poderoso. La ley del más fuerte impera. Todo es subdesarrollo humano y moral. Nuestros niños civilizados se pasan horas jugando con estas mierdas, absortos, ensimismados. Solos. Después resulta que en el colegio se les va la mano con facilidad o el pie. Y no miden. No saben que esa bota de fútbol con la que golpean no es virtual y puede hacer un daño irreparable. No controlan el impulso de disparar con el que llevan jugando tanto tiempo y tantas horas. Hace unos días un chaval de catorce años dejó en coma a otro de diecisiete de una patada en la cabeza. Parece que se peleaban por una chica. Parece que eran amigos desde la infancia. Hablar, hablan poco, ¿no? Y soñar, ¿con qué sueñan? Creo que ya es urgente que se regule legalmente la utilización de las nuevas tecnologías para los menores. Hay muchos padres que no controlan, no tienen ni idea de lo que supone su hijo encerrado con un ordenador conectado a internet. Una nueva violencia está surgiendo y hay que pararla ya. Ya.


Lo primero, esta buena señora ni ha usado un videojuego en su puñetera vida, ni sabe como son las carátulas de los juegos, ni conoce el código PEGI (http://www.pegi.info/es/)... Eso o está intentando difamar, lo cual es mucho más peligroso aún.

Lo segundo, lo grave no es lo que he puesto antes, lo grave es que se permite el lujo de afirmar una serie de sandeces sin, como supuestamente manda el código deontológico de todo buen periodista, informarse siquiera de que lo que está afirmando es real o no.

Y tercero, que ya es para cagarse, se permite el lujo de adoctrinar y dar lecciones a unos padres sobre algo de lo que no tiene ni pajotera idea y, encima, lo mezcla con una pelea entre dos chavales por una chica y lo que se puede ver o no por Internet...

De verdad, señora, váyase a la mismísima...

lunes, 2 de marzo de 2009

Verdad sólo hay una

He de reconocer que llevaba varios partidos sin acudir de forma continuada a Mestalla. El final del embarazo de mi mujer y el nacimiento de David me condicionaron/condicionan mucho mi tiempo y, ciertamente, la situación deportiva, económica y social del club no ayudan en exceso...

Ayer, no sé muy bien por qué, me encontraba con ánimos de acudir al viejo coliseo. Pero la cosa se torció desde el comienzo. Conforme salía del garaje con el coche comenzaba a llover... juro que pensé en darme la vuelta... El caso es que continué hacia el estadio.

Ya en los alrededores del campo, cervecita con los colegas, subidita por la torre B y, asfixiados, llegamos a nuestros asientos: simplemente desolador. El aforo se encontraba cubierto en algo más de la mitad. Tristeza, desesperación, abatimiento, desesperanza y, lo peor, apatía en las caras de nuestros vecinos de siempre, esos individuos que, con el paso de los años, han crecido, han envejecido, han celebrado y han llorado junto a mí en Mestalla. Pero lo peor es que algunos no estaban... y está por ver que vuelvan.

Durante lo 20 años que llevo yendo a Mestalla siempre he mantenido una tradición: la Coca Cola del descanso. para evitar las colas que siempre se producían en las barras de bebidas tenías dos opciones, o bajabas poco antes de que el arbitro pitara el final de la primera parte o te esperabas a que pasasen los 15 minutos de rigor. Ayer, por necesidades que no vienen al caso bajé nada más pitar el árbitro e, inesperadamente, el mayor de los vacíos: ni una sola persona en la cola, ni una triste alma.

Fin del partido, tristeza, desesperación, abatimiento, desesperanza y, lo peor, apatía en las caras de nuestros vecinos de siempre, esos individuos que, con el paso de los años, han crecido, han envejecido, han celebrado y han llorado junto a mí en Mestalla.

¿Qué nos está pasando?